Cuando los dos jóvenes de Liuben conectan, su intimidad toma la forma de un primer plano muy cerrado en donde cada movimiento provoca un desenfoque. En el resto del film (excepto en su disruptivo e inesperado final) fluye un drama social convencional y sin afectaciones sobre el desarraigo, el racismo y la homofobia en Bulgaria, aunque las temáticas de la película podrían ser espejo de otros muchos lugares. Su director Venci Kostov, afincado en España desde los once años, ha realizado en Málaga la que se está describiendo como primera película búlgara de temática LGTBIQ+. En Liuben se buscan hasta encontrarse dos protagonistas masculinos: Víctor y el personaje que da título a la cinta. El primero, de veintisiete años, es un chico (con novio y vida hecha en España) que regresa a su hogar búlgaro de la infancia con motivo del funeral de su abuelo. Es entonces cuando conoce a Liuben: un joven gitano que vende sandías en las cunetas del pueblo. La atracción de Víctor por Liuben es inmediata. Sin embargo, la cinta juega a no definir si el romaní se acerca a Víctor por oportunismo o por verdadero interés. Tras una trama que incluye otros temas sociales (como la venta de bebés), entre ambos nace un vínculo forjado por las circunstancias.
Venci Kostov coloca en los diálogos íntimos de su cinta, tan cercanos en forma y fondo a sus personajes, una comparativa entre la mentalidad española y la búlgara. El film recorre el sentimiento de rechazo social de sufre cada protagonista; con ello aborda la situación de desigualdad, la existencia de realidades que atentan contra los derechos individuales y la brecha social europea. Inevitablemente, el país de origen del director trae a la memoria las manifestaciones aparecidas en Bulgaria contra la película Close (2022), de Lukas Dhont, que tachaban a su director de pedófilo. Dejando atrás los siempre inexplicables gritos a favor de la opresión, Kostov hace su defensa de la libertad con esta denuncia que es Liuben; una película que, a la vez, tampoco renuncia a servir de carta nostálgica del cineasta hacia el entorno rural de su primera infancia.
Raquel Loredo